El planeta del Principito nos vista

(autor Andrés López Raml/Abril 2020)

Es un título llamativo, además, de cierto.

Hay dos lunas en este momento girando alrededor del planeta que habitamos. Desde el 15 de febrero del 2020, sabemos que hay otro satélite, además de nuestra entrañable Luna, atraído por la gravedad del giro terrestre.

Lxs astrónomxs le han puesto nombre a este asteroide: 2020 CD3. Se está yendo pronto, estiman que ya se va, ahora, en Abril, más o menos sigue viaje.

Quienes lo observaron y trataron de medir, calculan un tamaño aproximado de entre los 2 y los 6 metros de diámetro, es decir, es una enorme pelota pero no tanto.

Entonces, por lo pequeño, por eso digo que es el planeta del Principito.

Hay una serie de acontecimientos que están sucediendo en el mundo de la investigación y la ciencia que poner en juego paradojas; cuando la realidad no supera a la ficción, la empata, y esto produce un hecho estremadamente intrigante que desafía nuestro más profundo pensar y sentir.

Somos polvos de estrellas, es una frase que viene más de la poesía, de la lírica, y sin embargo, es un hecho comprobadamente físico y de esta dimensión existencial, la ciencia, específicamente la astrofísica, nos acaba de contar que el monóxido de fósforo surge del nacimiento de estrellas, además el descubrimiento relaciona este químico natural con el ADN, ya que allí está presente. En nuestra mismísima composición molecular.